Entre Deepfakes y Chatbots: El Desafío de la Seguridad en la Inteligencia Artificial y el Compromiso de Goody-2

El auge de la inteligencia artificial y los desafíos de seguridad

En la última década, la inteligencia artificial (IA) y los modelos de lenguaje generativos han experimentado un crecimiento exponencial. Sin embargo, este progreso tecnológico no está libre de desafíos de seguridad, un tema que se ha convertido en un punto de discusión cada vez más relevante.

Chatbots y problemas de seguridad

El incremento en la discusión corporativa sobre la IA responsable ha sido notable, pero a menudo se ve eclipsado por los problemas de seguridad asociados con los chatbots. Estos sistemas de IA, diseñados para interactuar de manera natural con los usuarios, han demostrado tener serias vulnerabilidades de seguridad aún sin resolver. Un ejemplo reciente de ello fue el incidente de deepfakes de la cantante Taylor Swift en Twitter, generado por un creador de imágenes de Microsoft. Este suceso subrayó la necesidad de implementar medidas de seguridad más rigurosas en estos sistemas.

Además, los chatbots de IA han sido objeto de restricciones y debates. La dificultad para encontrar una alineación moral que satisfaga a todos es uno de los principales obstáculos. Un ejemplo de ello es ChatGPT de OpenAI, que ha sido acusado de tener un sesgo político. En respuesta a esta situación, Elon Musk, CEO de SpaceX y Tesla, prometió un ChatGPT rival, Grok, que sería menos sesgado.

Respuestas de la comunidad de IA y futuros pasos

Las respuestas de los investigadores de IA a estos problemas han sido variadas. Muchos han valorado el humor y los puntos serios planteados por el proyecto Goody-2, que busca equilibrar la seguridad y la intrusión en los sistemas de IA. Este proyecto ha priorizado la seguridad sobre la utilidad y la inteligencia, explorando formas de construir un generador de imágenes de IA extremadamente seguro.

En cuanto a los posibles pasos futuros para Goody-2, se contempla la posibilidad de implementar un desenfoque interno en las imágenes generadas. Otra opción sería no generar ninguna imagen al final del proceso, lo que supondría un enfoque de seguridad aún más estricto.

En conclusión, la seguridad en los modelos de lenguaje y sistemas de IA generativos es un tema que requiere una atención constante. A medida que estos sistemas se vuelven más sofisticados, también lo hacen los riesgos asociados a ellos. Proyectos como Goody-2 son esenciales para garantizar que la IA se desarrolle de manera responsable y segura.

Susana es una profesional destacada en marketing y comunicación, creadora de contenido y experta en SEO. Es licenciada en Psicología por la Universidad de Santiago de Compostela y cuenta con un máster en Marketing y Comportamiento del Consumidor de la Universidad de Granada y la Universidad de Jaén. Además, ha compartido sus conocimientos a través de conferencias y workshops.
Con amplia experiencia en estrategias de marketing y comunicación, Susana ha logrado optimizar la visibilidad y el posicionamiento de las marcas a través de técnicas de SEO.

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